El Macarra indolente

Esta última semana he estado de vacaciones. Mi amiga, la de la barbacoa y depilaciones atómicas ahora no trabaja, así que hemos aprovechado para hacer algunos planes juntas con mi ahijada y mi bebote....

El lunes por la mañana decidimos que nos íbamos al parque de atracciones, su niña es demasiado pequeña, mi hijo es demasiado hooligan y yo...yo soy ya demasiado tarra, así que tampoco encuentro quien me de bola......

Quedamos a las 9:30 en el garaje, compramos nuestros bocadillos y las vainas de la muchachada, hicimos trasbase de sillas de viaje para el coche y metimos la dirección en el GPS del coche.....

Efectivamente, el concepto Parque de Atracciones es una abstracción para el satélite y para mí el concepto GPS es astrofísica nuclear....

Conseguimos meter la dirección de la casa de campo y del zoo que pillan cerca....y tiramos guiándonos más por la intuición de mi amiga que por el GPS.

En los túneles de la M-30 el GPS perdía señal y nos daba a entender que íbamos por una cañada real en medio de un abismo indeterminado......

Mi amiga se regodeaba aclarándome que el GPS es una puta mierda y que no sirve para nada.....yo intentaba defender al aparato del infierno....es como la familia, tú te puedes meter con ellos, pero son intocables para terceros.....con el GPS tuve la misma sensación: elucubraciones prosaicas.......

Los copilotos en coche ajeno sienten un placer morboso en aseverar que el objeto en el que tú depositas tu fé es lo peor de lo peor, tu sola predisposición a la obediencia les hace pasarse todo el camino diciendo frases personificadas en la voz de la locutora, como si fuera una vieja enemiga: Pero la tía ésta??? Venga hombre, pero por dónde nos quiere llevar???....

Pasa de vieja a enemiga al desprecio más absoluto por el itinerario propuesto, que suele coincidir con todo el centrazo de Madrid o con autopistas de peaje....

Apagué el aparato y por supuesto aparecimos en el Parque de Atracciones siguiendo las indicaciones de la carretera y escuchando a mi amiga...que es como una palomita mensajera.....

Cuando nos bajamos del coche Cocoliso me devolvió una mirada complaciente del tipo: Mamá si, creo en tí, no me equivoqué al bajarme de la nave espacial y elegirte.......

Aquella mañana desde que amanecimos a las 8.30 le estuve friendo con interjecciones plúmbicas y reiterativas sobre el planazo del día..., como él no habla y su nivel de conversación es más bien gestual, yo le gritaba: A dónnnnde vamos hoy???? Y yo misma me contestaba: Al Parque de Atracciones!!! muy entusiasta y cantarina....Todo el rato, toda cansina, mientras desayunaba, mientras le cambiaba, mientras le vestía....

Tú quieres ir al Parque de Atracciones? Y él aseveraba rotundo con su Mm!! con el desconocimiento propio de los bebotes pero con la confianza absoluta de que aquella tarada le estaba transmitiendo algo que daba muy buen rollo.....

El paso obligado por mercadona, por la farmacia y por la panadería para después permanecer todos muy expectantes en el coche, parados, con dos petardas trasteando el navegador creo que hizo pensar a Cocoliso que el tema Parque de Atracciones era el mismo coñazo que cualquier rutina cotidiana.....

Cuando por fin nos dispusimos a salir, me volví hacia él y le pregunté: tú quieres ir al parque de atracciones?? Me miró muy serio y me dijo que no con la cabeza, giró su carita y se puso a mirar por la ventanilla....Eso es meter un buen corte en bebinés y lo demás son tonterías......

Cuando llegamos todavía faltaban 20 minutos para que abrieran el Parque....nos sentamos bajo un árbol, los bebitos comieron su piscolabis (arrrg palabrón)..... y nosotras decidimos que nos calzábamos allí mismo los bocadillos del mediodía y así lo hicimos....la crianza da un hambre que te cagas....sobre todo si no estás trabajando......

Al ser lunes y haber comenzado ya las clases en algunos colegios, allí no había casi gente....con lo cual el día fue muy divertido....aunque con sus momentos bucles: si no nos montamos en la barca del circuito de la jungla 23 veces no nos montamos ninguna, No exagero nada, como no había colas, pues aquello era una especie de barra libre de las de gran resort playero, que le pides al camarero dos mojitos y uno te lo aprietas y con el otro te quitas la arena de los pies, como está todo incluido......

Cocoliso se bajaba de la barca al terminar y conocía perfectamente el camino de vuelta para posicionarse al inicio de la atracción.

Iba corriendo tan enloquecido que se cayó un par de veces por las escaleras de vuelta....algo que, si no es muy doloroso, le suele gustar, porque cada vez que pasábamos por las mismas escaleras me hacía una reconstrucción de los hechos......Interpretaba cómo había sido su caida, ponía  vozarrón de hostión y se hacía cura sana, después otra vez a salir pitando al inicio y tirar un beso seductor a la responsable de la atracción, no fuera a ser que no le dejara subir en la barca........

Mientras los nenes se estaban echando la siesta, yo tuve mi momento “nadie me da bola”.... Así que dejé a mi amiga al cuidado de la churumbelada y me fui sola a la atracción estelar...Aunque no me acuerdo qué nombre visionario tenía, la estructura y el concepto eran como de montaña rusa a lo bestia...... Era en la única atracción donde había algo de cola, ná, unas 12 personas, la mayoría adolescentes.

Por supuesto todos los que aguardaban turno iban de dos en dos....salvo yo -que parecía descontextualizada totalmente- y una especie de kinki, de unos 30 años, que también iba solo, con pinta de estar en régimen de tercer grado en alguna penitenciaria y no saber muy bien cómo pasar su mañana....él estaba rotundamente descontextualizado...

Enseguida comprendí que aquel iba a ser mi compañero de aventuras......De hecho, cuando el responsable de la atracción anunció que quedaban dos sitios libres, allí acudimos el Kie y yo, él con las mismas gafas de sol diseño Carrera que llevaba David Hasselhoff en el coche fantástico y yo con la determinación de mujer bragada que se sienta en el asiento del vagón de la muerte y acepta su destino en solitario, le caen los arneses metálicos y mira impasible el tendido como haciéndome un poco la chula.

Miré de reojo a mi Kie favorito que había extendiendo el dedo índice para sujetarse las gafas a la cara....la montaña rusa esa te ponía del bies, boca abajo, suspendido en el vacío....y el jodío se iba a marcar todo el recorrido con las gafas de sol puestas.......

Y lo hizo.

En cuanto aquella vagoneta tomó cuerpo, la chula de arriba comenzó a soltar unos gritos desgarradores....., histéricos,....incluso con efecto: comenzaba con la vocal U y terminaba el grito con la E. ...Patética....y encantada.....

El Kie ni abrió la boca en todo el trayecto, cuando aquello frenó, yo me recompuse sin ademanes ni resuellos y él separó su índice de las gafas.....qué grande, ahí seguían......

En cuanto me bajé de la atracción, (Cocoliso y yo somos B+ y eso se nota)....me fui corriendo a dar toda la vuelta a la atracción, tropecé y anoté mentalmente reconstruir los hechos para deleitar al bebote, tiré un beso al responsable de la atracción, no fuera a ser que no me dejara subir, y volví a disfurtar de la atracción hasta tres veces más....pero ya sin Kie....sniffff....

Cuando regresé donde me esperaba mi amiga miré a Cocoliso que seguía dormidito estilo querubín, le acaricié la mejilla y le dije flojito: Macarra de feria no,...por fa.....